Tim Burton vuelve a uno de sus temas favoritos: Victor, un niño al que apasiona la ciencia, añora a Sparky, su perro muerto en un accidente y experimenta en su laboratorio hasta que lo devuelve a la vida.Otros niños siguen su ejemplo, con resultados extraños.
Es no sólo un "remake" de uno de sus cortos de 1984 sino también un homenaje al Frankestein de Mary Shelley. Una visita a un clásico pasada por un creador original y rompedor, que se atreve con el 3D y el blanco y negro al mismo tiempo y que puede trabajar para Disney siendo el mismo de siempre.
Y unas líneas del prólogo de Frankestein, por Mary Shelley donde nos cuenta cómo se le ocurrió la idea del libro y como le interesaba ejercer sus recursos de escritora pero también divertirse y salirse un poco de los convencionalismos de las novelas de su época a las que considera ñoñas e irreales.
The circumstance on which my story rests was suggested in casual conversation. It was commenced partly as a source of amusement, and partly as an expedient for exercising any untried resources of mind. Other motives were mingled with these as the work proceeded. I am by no means indifferent to the manner in which whatever moral tendencies exist in the sentiments or characters it contains shall affect the reader; yet my chief concern in this respect has been limited to the avoiding the enervating effects of the novels of the present day and to the exhibition of the amiableness of domestic affection, and the excellence of universal virtue. The opinions which naturally spring from the character and situation of the hero are by no means to be conceived as existing always in my own conviction; nor is any inference justly to be drawn from the following pages as prejudicing any philosophical doctrine of whatever kind.